Aquí te dejo 2 opciones exquisitas para cocinar salmón

El salmón tiene un delicioso sabor, cuenta con propiedades benéficas que lo convierten en un alimento ideal para llevar una dieta sana, es una importante fuente de proteína, contiene una considerable cantidad de ácido graso Omega 3, y es excelente fuente de minerales: yodo, magnesio, fósforo, hierro y calcio, así como otras vitaminas.


Opción 1

* Salmón en salsa agridulce.

Ingredientes:
3 cucharadas de aceite de oliva
4 filetes de salmón con piel
2 cebollas rojas
150 ml. de vinagre de Módena
1 cucharadita de azúcar
1 cucharada de mantequilla sin sal

Vamos a poner una cucharada de aceite de oliva en una sartén al fuego y cuando esté bien caliente, pondremos los filetes de pescado por la parte de la piel. Previamente salpimentaremos a voluntad las piezas de pescado para el salmón en salsa agridulce.

Cocinaremos los trozos de pescado por ese lado hasta que los bordes de la piel luzcan un precioso color dorado, como una costrita crujiente. Esta fase nos llevará aproximadamente unos 12 minutos, dependiendo del grosor de los filetes que hayamos elegido para preparar el salmón en salsa agridulce.

Una vez alcanzado ese punto en la piel, voltearemos el pescado y dejaremos que se haga por ese lado, apenas 3 ó 4 minutos nada más.

Mientras el pescado se va haciendo, en otra sartén colocaremos las otras dos cucharadas de aceite de oliva a fuego fuerte y, cuando esté caliente, sofreiremos las cebollitas hasta que se vuelvan de un color marronáceo y estén un poquito crujientes, alrededor de 7 minutos.

Ahora añadiremos el vinagre, el azúcar y un poquito de sal. Removemos y dejamos que la salsa para el salmón agridulce se cocine hasta que se vuelva espesa. Entonces retiramos del fuego y añadimos la mantequilla y removemos.

Presentamos el salmón sobre el lecho de las cebollas caramelizadas.

Con este platillo aseguro una excelente cena.

* Una opción de guarnición pudiera ser espárragos y/o papas cambray que en compañía con el salmón hacen una excelente combinación




Opción 2

* Salmón con pesto y gnocchi al parmesano

La propuesta de hoy es, el Salmón con pesto y gnocchi al parmesano es un plato lleno de sabor, la armonía de las distintas elaboraciones entra en juego en cada bocado, son sabores muy particulares pero trabajados de forma respetuosa.

Una receta muy fácil de hacer que nos permite disfrutar de nuestra pasión por la cocina mimando cada uno de los pasos de su elaboración, la receta de salmón con pesto y gnocchi con queso parmesano no nos llevará mucho tiempo, pero sí es un plato que hay que degustar recién hecho, disfrutando del pescado con una superficie crujiente, de una salsa que todavía ofrece la tersura de sus hojas frescas, y de otra salsa cremosa que acaricia su guarnición.

Ingredientes
 (4 comensales)

1 lomo de salmón
4 cucharadas soperas de pesto de rúcula y avellanas
100 gramos de gnocchi de patata
1 chalota
1 trozo de raíz de jengibre del tamaño de una avellana
1 trocito de nuez moscada
225 gramos de leche evaporada
50 gramos de queso parmesano
Unas hojas de rúcula
Pimienta negra recién molida
Sal negra
Sal fina
Aceite de oliva virgen extra.


Elaboración

Prepara en primer lugar el pesto de rúcula y avellanas, y resérvalo en una salsera cubierto con film transparente. Pon una olla al fuego con abundante agua para cocer los gnocchi, cuando el agua rompa a hervir, añade sal al gusto y los gnocchi, a medida que vayan subiendo a la superficie (lo que indica que están hechos) retíralos poniéndolos sobre un colador para escurrirlos.


Mientras tanto, pela y pica la chalota, pela el jengibre y rállalo. 
En un sartén pon un poco de aceite de oliva (también se puede utilizar mantequilla) y pocha la chalota con el jengibre a fuego lento, cuando esté tierna y transparente, incorpora la leche evaporada, sal y pimienta al gusto, sube el fuego y deja cocer un par de minutos, moviendo con una espátula para que no se adhiera al sartén, y añade los gnocchi y el parmesano rallado, mezcla bien hasta que el queso se funda y se integra y retira del fuego.

Finalmente haz el salmón a la plancha en una sartén o parrilla con unas gotas de aceite de oliva, el salmón es un pescado graso y no conviene incorporar más. Empieza haciéndolo por la parte de la piel, hasta que ésta esté dorada y crujiente, y después dale la vuelta para que se haga por el otro lado, recuerda salarlo al gusto previamente. La temperatura y el tiempo dependerán del grosor del salmón y también del gusto personal, si te gusta poco o muy cocido.

Una vez cocido el salmón bañalo con el pesto y sirve la guarnición y tu platillo está listo para deleitar el paladar.

* Como sugerencia el pesto si así lo decidieras puede ser de albahaca, una hoja deliciosa que perfuma y da sabor a tu platillo.




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